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La Casa de Zorrilla expone obra poético-gráfica de García Riobó
19

Feb

2019

La Casa de Zorrilla expone obra poético-gráfica de García Riobó

La muestra, organizada dentro del programa 'Valladolid letraherido', puede visitarse de forma gratuita en la casa-museo hasta el 31 de marzo

La Sala Narciso Alonso Cortés de la Casa de Zorrilla acoge la exposición ‘Días de invierno’, con piezas del artista bejarano afincado en Valladolid Javier García Riobó.  

 

Enmarcada en el programa ‘Valladolid letraherido’, la muestra se estructura en dos partes: ‘poemas’ y ‘poemas en negro’. La primera reúne trabajos inspirados en instantes temporales precisos que el artista ha iluminado con los colores que encontró en la prensa el día exacto en el que decidió individualizar cada imagen. Construye, así, una reflexión plástica sobre los hechos diarios.

Por su parte, ‘poemas en negro’ es una presentación visual sobre pantalla de una serie de poemas realizados por el autor con titulares extraídos de la prensa, tratados fotográfica o digitalmente.

‘Días de invierno’ puede visitarse hasta el 31 de marzo, de forma gratuita, durante el horario habitual de la Casa de Zorrilla (de martes a sábado, de 10 a 14 y de 17 a 20 horas, y los domingos y festivos en horario de mañana).

Días de invierno

Pedro Ojeda Escudero, director de “Valladolid Letraherido”, explica así el proceso creativo del artista en este trabajo: “En los meses de un invierno fue seleccionando del periódico del día y recortando minuciosamente imágenes: fragmentos de fotografías, bandas de colores. Guardan, en su raíz, la condición diaria de la noticia o de la publicidad, su fugacidad. Fueron publicadas para ser consumidas en el día, olvidadas después, sustituidas por otras al día siguiente. Incluso podríamos reconstruir su punto de partida y estudiar el contexto en el que aparecieron. Es el latido profundo de estas imágenes. Sin embargo, Javier García Riobó las dota de un nuevo significado cuando las combina, haciendo que trasciendan esa condición frágil de lo diario, transformándolas gracias al poder de la mirada artística, llevándolas a un poder universal y permanente. En las imágenes hallará el espectador aquel origen cotidiano y su trascendencia, sumadas para significar algo nuevo”.

 

“Ese es el mismo procedimiento con el que trabaja los poemas visuales que se exhiben en el monitor de la sala. Palabras recortadas de la prensa y combinadas. El contexto en el que se publicaron ha desaparecido, omitido voluntariamente por el artista, que selecciona las palabras adecuadas. Su nueva combinación hace que trasciendan. Alcanzan un significado que se nos ocultaba. El camino es el mismo: del papel periódico cotidiano al mundo artístico”, afirma Ojeda.

 

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